Ante la duda, tras una inspección con cámara robotizada, surge la necesidad de la realización de una prueba de estanqueidad para certificar finalmente si la tubería es estanca o no. Por este motivo nuestra empresa dispone de equipos Härke para certificar mediante una prueba neumática (con presión de aire), obturando ambos extremos de la tubería, para introducir 1 bar de presión y tras un breve período de tiempo y mediante una gráfica incorporada en un software informático, podremos observar en un ordenador si la tubería pierde presión.
La prueba realizada quedará grabada y entregada im- presa y en un pendrive a nuestros clientes, cumpliendo la normativa vigente para pruebas de estanqueidad en saneamiento según DIN EN 1610 y sobre las directivas actualmente vigentes al respecto publicadas por la orga- nización ATV.
Cuando la prueba de estanqueidad resulte negativa, se ofrecerá al cliente por defecto la rehabilitación de la tubería mediante el encamisado en manga, y una vez realizada la rehabilitación se volverá a realizar una prueba de estanqueidad que certifique que en esta ocasión la tube- ría sí se encuentra estanca.
A petición del cliente, en ocasiones cuando se rehabilitan tubulares en manga, se entrega una muestra de la manga instalada y se entrega el certificado de estanqueidad.